viernes, 17 de junio de 2011

Los amigos de Dios

La inspiración de Dios no es astrología ni geomancia ni ensueños,
los sufíes la llaman inspiración del corazón
considérala "inspiración del corazón" porque el corazón es Su morada.

Las revelaciones verbales son específicas de los profetas
y las inspiraciones divinas son específicas de los amigos de Dios.

Si tú deseas ver el bello rostro del Amigo
sabe que el corazón es el espejo en el que a Él se contempla.

Lo he escrito todo partiendo de mi propia experiencia
y no robándolo, como los demonios, a los ángeles
quienes por estar privados de la ayuda divina
no superan el nivel de la imitación ni poseen la visión mística.


Cada uno de los amigos de Dios, según la gracia que le ha llegado, ha alcanzado una morada y un estado espiritual diferentes. Como la diferencia en los estados da origen a diversidad en las palabras y en las alusiones, cada ruiseñor en este jardín entona una melodía distinta y cada ave del amor posee un canto nuevo. Esta diferencia de estados espirituales y la diversidad de las alusiones resulta ser una dificultad para la gente común.

El que se halla perplejo con estas realidades
debe llegar a conocerlas.


Después de los profetas, el siguiente grupo de hombres perfectos son los amigos de Dios, que guían a la gente en sus viajes a lo largo de este camino o línea continua y circular imaginaria, conocida como el viaje de descenso y ascenso al Origen.


Según los sufíes, entre los amigos de Dios, al igual que entre los profetas, existen también diferentes niveles de perfección, una diferencia que depende de la morada espiritual que han alcanzado en su viaje interior, por medio de la revelación visionaria y la visión contemplativa. Cada uno habla del camino y sus etapas, del caminante y de la Meta, según su propia capacidad y de una forma diferente.


Los amigos de Dios son de diferentes tipos. Algunos son señores de la ebriedad espiritual: en su ebriedad desvelan los misterios divinos que han pasado por su corazón puro y, en su inconciencia de sí, no guardan en secreto lo que han contemplado o el estado espiritual que han experimentado.

//Pienso en la rima, pero me dice la que es Dueña de mi corazón:
"No pienses en nada más que en mi encuentro
quédate sentado con felicidad, oh meditador Mío de rimas.
Porque tu rima más bella, es Mi presencia.
¿Qué son las palabras para que pienses en ellas?
¿Qué son las palabras? Espinas en el seto de la viña." //


Las palabras "llamo a Dios" pertenecen al versículo del Corán: "Éste es mi camino, basado en la intuición: llamo (a los hombres) a Dios".


El profeta Mohammad es el último de los profetas, con el que culmina la llamada de todos los demás profetas anteriores y comienza la de los amigos de Dios.

Fragmentos sueltos de El Jardín del Misterio, de Mahmud Shabestari.